sábado, 3 de diciembre de 2011

SER UNO SOLO, SEAMOS PERÚ

La identidad nacional es el conjunto de sentimiento hacia todo aquello que representa a una nación, un país y de los cuales el pueblo se siente  parte de esto, de todas sus riquezas sean materiales o inmateriales, las cuales se deben de valorar y hacer respetar para que en las siguientes generaciones puedan gozarlas también.
Existe hoy en día entre los habitantes de un mismo lugar la preocupación de poder entre todos rescatar sus raíces, de hacer conocer las propias costumbres a personas que no son del lugar, esto indica la fuerte conectividad que existe entre los pobladores y su tierra, lo cual es un fuerte indicador de identificación hacia su país.
La identidad Nacional de nuestro Perú, es algo sumamente fundamental sentirse identificados con  nuestras distintas raza, nuestras regiones, nuestras  magnificas leyendas, nuestras famosas comidas, nuestras espectaculares culturas, nuestra generosa biodiversidad, nuestro riquísimo Perú;  es un sentimiento hacia tus propias raíces, tus cimientos los cuales nunca se deben de dejar de lado ni mucho menos darnos igual el hecho de pertenecer a un lugar tan beneficiado por la naturaleza como también por las distintas culturas que nos anteceden.
Hoy en día nos deberíamos sentir mucho más orgullosos de nosotros mismos, de Perú ya que es reconocido a nivel mundial en distintos ámbitos ya sea por su exitosa gastronomía, sus restos arqueológicos los cuales son inmensamente ricos en historia y al mismo tiempo de sentirnos vivos al escuchar el nombre ¨PERÚ¨ el cual se debe sacar el  mejor provecho a los destacados premios y reconocimientos que tenemos como por ejemplo:


  • ¨Machu Picchu maravilla del mundo moderno¨;
  • ¨Pisco peruano sigue ganando reconocimientos en el mundo¨; El pisco peruano obtuvo una vez más un reconocimiento en el exigente mercado francés, el cual es referente mundial, informó la empresa peruana Pisco Viejo Tonel. Esta empresa fue premiada recientemente con Medallas de Oro y Plata en el prestigioso concurso organizado por la Asociación de Enólogos de Francia Vinalies International 2011.’
  •  ¨El café peruano fue premiado en Estados Unidos¨ (2010); En la feria de la Asociación Americana de Cafés Especiales, fue elegido como el mejor café especial del mundo en Anaheim, California. El café peruano orgánico es muy apreciado afuera y acaba de ser elegido el mejor en un concurso internacional. Por cuarto año consecutivo ganador.    
  •   La consultora internacional llamada ‘Future Brand’ ha sacado en el 2009 un estudio de mercado donde el Perú ocupa la tercera posición como destino histórico más importante en el mundo (tuvo eco en muchos medios digitales);
  • Otro de los varios reconocimientos que nuestro país tiene a nivel internacional fue ¨La comida peruana es la mejor en toda Latinoamérica¨ así lo destaca un artículo publicado en varios medios asiáticos.
  • 'Excellence Awards 2011' se premiaron a treinta (30) compañías peruanas por su calidad empresarial.

Estas son algunos de los distintos reconocimientos los cuales nos hacen sentir un gran orgullo por el lugar en donde nacimos pues estos premios no cualquiera se los lleva, lo que en mi parecer nos falta es saber utilizar estas armas para poder así fomentar mucho más el turismo en el Perú, explotar nuestras riquezas y darlo a conocer a más partes del mundo, y esto se puede lograr con la identificación de todos los peruanos con sus raíces y con su País; Ya que si sucediera lo contrario y los peruanos no nos sentiríamos a gusto de nuestro país y por ende no fomentar el turismo y sus riquezas, nos toparíamos con dos importantes obstáculos los cuales no nos dejaría avanzar y prosperar estos serían:

·         Un gran desbalance económico si no nos sintiéramos identificados,  pues el turismo se ubica en el tercer puesto de ingresos económico en el país y pues no tendría la acogida que en la actualidad existe, en los establecimientos de hospedaje, establecimientos de alimentos y bebidas, lo que encierra a transportes como los traslados, las agencias de viaje o cualquier otros servicios relacionados directamente con el turista, los cuales deben de satisfacer y relazar  las expectativas en todos los ámbitos.


·         Otro punto a mi parecer el de más importancia sería que al no sentirnos conectados o identificados con nuestro país nosotros no valoraríamos nuestros innumerables y asombrosos patrimonios naturales y culturales ( algunos de los cuales son patrimonios de la humanidad declarado por la UNESCO como vienen siendo Santuario histórico de Machu Picchu, Parque Nacional del Río Abiseo, Parque Nacional del Manú, Líneas y geoglifos de Nazca, Sitio Arqueológico de Chavín, entre otros )  y a consecuencia de esto los maltrataríamos además de dejarlos en el olvido esto no permitiría que se preservaran  a lo largo de la historia para las próximas generaciones y no trajera los distintos beneficios a los pobladores locales de donde se ubique cualquier patrimonio.

El Perú se diferencia de muchos de los países en el mundo por sus grandes y exitosos logros los cuales nosotros los peruanos nos debemos sentir dichosos por el prestigioso lugar en donde nos tocó nacer, vivir,  el cual nos brinda muchas oportunidades de salir adelante ya que tenemos innumerables fuentes las cuales debemos saber explotar y cuidarlas al mismo tiempo ya que es importante preservarlo para que las siguientes generaciones al igual que nosotros lo puedan gozar y apreciar al máximo.
VIVIANA VERÁSTEGUI SÁNCHEZ.

Llegó el momento de Don Museo

Autor: José Luis Fernández Segura

La mayoría de los que vivimos dentro  de una ciudad enriquecida de tanta historia como lo es Trujillo, no hemos visitado muchos atractivos con los que ella cuenta pero más aún los diferentes recursos de apoyo e información turística como son los poco visitados museos.

Nuestra ciudad cuenta con 6 de ellos, más una colección privada y una pinacoteca religiosa, a los mismos que se les suman los museos de sitio de la ciudad de barro Chan-Chan y el inaugurado el pasado año Huacas de Moche.

Lo ideal, concreto y directo de hacer para realizar turismo colmando todas las expectativas es primero informarse en un recurso como lo es un museo, luego de visitarlos y “empaparnos” con el tema a visitar emprenderemos recién la visita al atractivo de así decidirlo.

Por otro lado son lugares de poca afluencia y para los amantes de la tranquilidad estos lugares son ideales por lo que las visitan serán agradables y no serán una competencia en busca del mejor lugar para observar. Tomando en cuenta la distancia y precio, si consideramos como punto de salida la plaza mayor de la ciudad, es bastante corta la distancia con todos los que se hallan en el centro histórico más no para los que se hallan cerca de los restos arqueológicos de Chan-Chan y Huacas de Moche, para ellos existe una diferencia de 10 a 15 minutos.

Si hablamos de los precios, son bastante accesibles y cómodos para todo el público en general  las entradas pueden costar desde un mínimo de 0.30 céntimos de nuevo sol y llegan a un máximo de 10 nuevos soles.

Tenemos museos para todos los gustos y en primero lugar para los que buscan historia y desarrollo cultural a los siguientes museos:

·         Museo de sitio de Chan Chan

·         Museo de Huacas de Moche

·         Museo de Arqueología – UNT

·         Museo Catedralicio

·         Museo de colección privada Cassinelli



*Pinacoteca de la Iglesia del Carmen, la misma que cuenta con más de 150 lienzos de la época colonial.



En segundo lugar para los que optan por algo diferente tenemos los siguientes:



·         Museo de Arte Moderno

·         Museo de Zoología

·         Museo de Juguete

Como se ve no es costoso ni cansado y nos aleja de la rutina del día a día, es intelectualmente nutritivo poder visitarlos por eso visitemos los museos de Trujillo, hoy y siempre.




viernes, 2 de diciembre de 2011

Una Maravilla Natural, Gocta!

En nuestro hermoso y querido Perú, tierra de bellezas inigualables, únicas y raras; se esconden maravillas que ningún ser humano puede jamás imaginar que existan en un solo lugar.

Tenemos la dicha de haber nacido norteños, dueños de un legado mas rico que el de los incas, rodeados por maravillas de barro, piedras y arcilla, envueltos en una flora y fauna únicas en el mundo; capas de sacar sonrisas y suspiros a cualquier ingenuo visitante que arriba a estos extraños legados, dejados por nuestros antepasados y sobre todo por la bella naturaleza que nuestro Señor ha colocado detrás de nuestros cerros y montañas.

Es así como hace unos años ya, un grupo de alumnos aventureros y con muchas ganas de conocer el tan famoso Chachapoyas, arribamos a esta ciudad con la ilusión de conocer nuestro Machu Picchu norteño, Kuelap; con las ganas que nos caracteriza enrumbamos hacia nuestra travesía.

Recuerdo haber soñado siempre con conocer Kuelap, tanto se hablaba de este monumento hermoso en verdad; con una impresionante arquitectura en roca hecha por una cultura mucho más antigua que los incas, y al igual que nuestra maravilla Machu Picchu escondida por siglos, ajena a lo que sucedía en el mundo moderno.

Es así como después de viajar por horas, pasando por unos hermosos parajes, vistas únicas que solo nos puede mostrar nuestra ceja de selva; que cada vez parece más un lienzo pintado por expertos artistas paisajistas, llegamos a nuestro tan esperado fin, Kuelap.

Si bien es cierto que la atracción mas grande del viaje era este; pero creo que todos concordaremos que la maravilla mas hermosa que pudimos vislumbrar fue la Catarata de Gocta.

Quien se podría imaginar que detrás de unos cerros, y tras caminar mas de 3 kilómetros, se mostraría ante nosotros una serpiente de agua fría, capaz de dejarnos con la boca abierta, no solo del cansancio sino de lo hermoso del paisaje.

Mientras caminábamos, hacia nuestro destino, íbamos notando lo maravilloso que es el paisaje que rodea esta maravilla natural; es asombrosa la cantidad de flora que se puede encontrar en el recorrido hacia la caída de agua; nos quedábamos boquiabiertos cada ves que pasaban las mariposas de bellos y singulares colores y ver como posaban ante nuestros ojos con sus danzares; para lograr ser captadas por un flash que pudiera con el tiempo mostrar la maravilla que esconden entre sus alas.

Del mismo modo nos pasaba con las hermosas flores y árboles singulares encontrados a lo largo de la caminata, la forma del paraje, la pulcritud del cielo azul y las nubes mas blancas que halla podido observar en los diversos viajes realizados, solo eran muestra que nos acercábamos hacia algo mucho mas hermoso que todo lo visto. Así pues llegamos a una pendiente de donde se podía observar todas las caídas de la tercera catarata más grande del mundo y que con mucho orgullo podemos decir que se encuentra en nuestro amado Perú.


Al llegar al final de la caída, el simple rose del vapor del agua que llega hasta este lugar te llena de una paz única; que si bien es cierto solo se puede comparar con la que uno siente al estar sentado en la cima del mirador de Machu Picchu; puedes llegar a dar gracias por permitirte sentir, vivir, amar, experimentar y maravillarte con algo tan hermoso producto de algo divino simplemente. Es así como nace la pregunta ¿Qué esperamos los peruanos para aprender a identificarnos con todas las maravillas que tenemos escondidas detrás de unos guardianes de piedra y tierra? ¿Que hacemos sentados en una silla de oro? Como alguna ves lo dijo un celebre escritor; el norte tiene bellezas ocultas esperando como bellas durmientes, a su príncipe azul que venga al rescate de ellas.



 Katia Rivasplata

INNOVANDO LA CAMPIÑA DE MOCHE CON CIRCUITOS TURÍSTICOS ARTESANALES

Hoy en día surge la necesidad de innovar circuitos turísticos alternativos, ya que tenemos una demanda turística más exigente, que urge satisfacer, para que podamos generar una mayor estancia en nuestra ciudad y que estos puedan realizar actividades turísticas específicas, donde se dé mayor participación al visitante, y para ello necesitamos de tipos de servicios y productos que deben contar con un servicio de calidad óptimo. Sin ir muy lejos nosotros contamos con un potencial importante constituido por los artesanos de la Campiña de Moche, donde con un poco de apoyo tanto de instituciones públicas como privadas se puede generar la implementación de un circuito turístico artesanal que permita al turista convivir y aprender sobre la elaboración de los productos artesanales propios de la zona y disfrutar de las costumbres dentro de la Campiña, así mismo generaríamos mayor participación del poblador mochero y una fuente de empleo para ellos. Algunos ejemplos significativos de organización serían, la Casa del Arte: "El Rostro Inconcebible” dirigido por los hermanos García, donde se vivirá una experiencia inolvidable por el detalle del recibimiento con las melodías del famoso pututo utilizado desde años atrás por los ancestrales Moches para dar la bienvenida, así mismo los anfitriones continúan con la recepción que te remontan a sus antepasados, es aquí donde realizan la demostración con alegría y cánticos sobre su arte que es la elaboración de la cerámica que fue aprendida de generación en generación.
Otro punto importante sería el taller Artesanal “El Carrizo”, dirigido por la señora Pilar Asmat, nosotros como visitantes desde que ingresamos a compartir con la familia Asmat nos harán sentir como parte de su familia, ya que ellos tiene toda la voluntad por enseñarnos todo sobre su trabajo, que igualmente fue transmitido de generación en generación, ellos elaboran productos en carrizo y birulí. Cuando uno observa a la familia elaborando las famosas canastas afloran los recuerdos de nuestras abuelas o madres cuando llevaban dichas canastas para realizar el mercado, que anecdótico, porque estas mismas familias ahora elaboran con la misma materia prima artículos para decoración. También está Manos Mocheras, con un trabajo de fino acabado, muy bueno.
Nosotros podemos generar alternativas para diversificar la oferta turística de Trujillo, si bien es cierto está previsto en la tan promocionada Ruta Moche, es importante la concertación de las instituciones públicas y privadas vinculadas al sector turístico, para integrarnos y generar que nuestro destino Trujillo – La Libertad sea más que competitivo. 
                                                                                           Lourdes López Orbegoso

jueves, 1 de diciembre de 2011

Calipuy: Perdido en el tiempo

¿Alguna vez han oído hablar de “la puya Raimondi”? ¿”Guanacos”?¿o hasta el mismo nombre ”Calipuy”? pues para ser sinceros solo las personas que estamos involucradas netamente en turismo o los de biología, botánica y demás carreras relacionadas con la naturaleza lo deben haber oído alguna vez en sus vidas. Y es que ya sean por pocas o muchas razones la Reserva y Santuario Nacional de Calipuy ha mantenido un perfil bajo desde su creación en 1981 para la conservación de la planta más alta del país y de los únicos auquénidos en el norte peruano como lo son los hermosos guanacos que en conjunto hacen de esta una de las biosferas más representativas del nororiente peruano gracias a su rica flora y fauna que hacen de este lugar único y mágico.
La Reserva y Santuario de Calipuy se localiza en la provincia de Santiago de Chuco, departamento de la Libertad y cubre un área de 60,000 hectáreas, aunque el área goza de potencial turístico, esta actividad es casi inexistente. Los únicos visitantes ocasionales son estudiantes escolares y universitarios provenientes de Santiago de Chuco y Trujillo. Sin embargo, dentro de la Reserva y Santuario se pueden realizar caminatas, ciclismo de montaña, camping, toma de fotografías, filmaciones y estudios de investigación. cosas que claro está la gente suele ignorar. Pero ¿Por qué siendo Calipuy un lugar tan atractivo para hacer una parada, no es tan concurrido? Veamos algunas causas que pueden responder a nuestra pregunta:
  • Para empezar Calipuy se encuentra en la sierra liberteña por lo que hay que tomar un bus de Trujillo (capital del departamento) hacia Santiago de Chuco la cual toma seis horas en 183 km., luego de eso tenemos que tomar otro bus que nos lleve desde Santiago de Chuco hasta la localidad de Calipuy lo cual son 46 Km. en tres horas, para terminar tenemos que caminar desde Calipuy hasta lo que es en si la Reserva y Santuario, esto nos tomara unas 4 a 6 horas más, llegando así finalmente a nuestro destino.
  • Otro punto importante es la poca infraestructura turística. Tampoco hay planes para realizar actividades de turismo organizado, ni tampoco hay señalización del lugar.
  • invasión de terrenos y presencia de ganado: luego de la etapa del terrorismo, pobladores de distintos lados del país invadieron los terrenos del Santuario y establecieron el poblado ilegal de Collayguida. Este poblado, ubicado en la parte oeste del área protegida, alberga a 70 familias, teniendo cada una un promedio de entre 15 a 20 vacas y 80 ovejas. Todo este ganado se alimenta de la vegetación del parque, además de propiciar con su presencia la quema de puyas Raimondi.
  • Falta de vigilancia y control por insuficiente personal e infraestructura: sólo hay tres guardaparques en la región.
La realidad de nuestro país es punto aparte, cuantos de nosotros quisiéramos ir mañana mismo a conocer este esplendido lugar, pero como muchos otros se convierte en un problema ya que ni siquiera tenemos un buen acceso por tierra y menos por aire, es decir estamos a la merced de las autoridades competentes el poder admirar algún día este tesoro regional. Sin embargo como un genuino estudiante de turismo día a día crece más las ganas no solo de poder apreciar este singular lugar sino también de hacer algo por esta  Reserva y Santuario y por muchas otras más que se encuentran en las mismas condiciones...

Eduardo Salinas Bernal

EL PLACER DE VIVIR BAJO UN MONTÓN DE ARENA

 ¿Estamos los peruanos condenados a vivir sobre lo maravilloso de la naturaleza?, es una cuestión que me la hago cada vez que me encuentro meditabundo, sobre el asiento de un bus en plena marcha hacia algún destino del Perú. Lo digo porque indudablemente "percibo" la belleza del paisaje en cada kilómetro que recorro, en alguna y casual aventura de vez en cuando. Pero duele también, y eso se "percibe" aún más, cuando el valor de la belleza y el valor de lo extraordinario se va desvaneciendo  gracias al  desinterés  y a la poca voluntad de cuidar algo que sorprendentemente es nuestro.  
Hace como unos 3 años inexactos, tuve la esporádica fortuna de llevar mi conciencia y estadía por el Sur del Perú, ahí me albergaba un puesto laboral en un conocido establecimiento de hospedaje. El destino era Ica, una ciudad rica en historia y cultura de la tradicional. Cerca de algunos días, ya empezaba a conocer un poco más de esta ciudad: algo comercial, regularmente poblada y extremadamente calurosa. Definitivamente un gran reto de adaptación para cualquier foráneo, exonerando a algunos norteños y selváticos de nuestro pais (por su clima parecido). Pero en definitiva, una gran experiencia, trabajar en un imponente hotel  con sus limitaciones gerenciales e ir explorando una ardiente ciudad. Y digo ardiente porque la presencia del sol en huacachina es eterna, tanto así que muchos hoteles hasta el día de hoy, ofertan dar una habitación gratis a cualquier huésped, el día que en Ica no se pueda ver el sol... 
En realidad, después de esto, no sabía lo que me esperaba. Gracias a un amigo (el barman del hotel) es que  llegué hasta allí y tuve la satisfacción de emprender una marcha hacia un lugar cerca, pero grande y desmedido a la vez. Me refiero al oasis más conocido del Perú y dubitativamente, creo también de Sudamérica, se está hablando de la insigne "Huacachina".
En la trayectoria se vislumbraba una belleza de dunas, imponentes ellas, atrapadas por el tiempo en mi parecer y con mucha energía producto de su simpatía, congenio y convivencia con ese sol fuerte y eterno que suele amanecer todos los días allá. El vehículo a utilizar fue una fresca y ruidosa moto taxi, que con esas puertas descubiertas propias de este vehículo, nos permitieron mitigar el calor  y sacar provecho a la vista. Después, en 5 minutos ya habíamos llegado, sintiendo ese calor abrasador y teniendo que dejarse acorralar por un imperio de dunas eminentes. Todo parece ilusión, palmeras gigantescas y vigorosas como si no les afectara el sol en lo absoluto, un suave y silencioso viento  acompañado de una laguna causante del ocio y relax de mas de cientos de turistas siendo este en su mayor magnitud, extranjeros.

Definitivamente, si de este lugar me preguntaran ¿De la Huacachina, con qué te quedas?, yo respondería que con su gente y con la sensación de paz y relax que se vive en ese increíble lugar. La infraestructura pública, por su lado, ha sido un generador de acceso para que mucha gente pueda llegar a ella y conocer un poco más de esta belleza,  fomentando el interés de la inversión privada, cooperando para que este atractivo sea un producto turístico con una demanda  casi estándar en todas las estaciones del año. Por ejemplo, es insólito que un restaurante o un establecimiento de hospedaje en Huacachina no tenga un bar o una piscina, y mejor aún si es al borde de alguna duna, ya que es la representación de la ironía por la naturaleza; estar regocijado sobre las aguas calmadas de una piscina, tomando un pisco sour en medio de un desierto donde lo único que alcanzas a ver es arena…
El movimiento comercial  es muy  dinámico, ágil y a la vez respetuoso con la tranquilidad del visitante. Hay en su mayoría, dentro de esta oferta turística, casas de alojamiento, restaurantes, discotecas, oficinas de información turística y agencias de viaje promoviendo en su 90 % el tema de deportes de aventura. Este tema es crucial para complementar de  manera excitante mi experiencia de viaje en el oasis de Huacachina. Pues tomar un tubular, y emprender un camino hacia la aventura con altos y bajos; con caídas y deslices; con frenos e inclinaciones encima de un terreno perfecto para el desarrollo de este deporte, es verdaderamente genial. Sin lugar a dudas son experiencias que dudo mucho encontrar un lugar para practicarlo a tal intensidad como la de esa vez, la verdad, lo dudo mucho. Pero aguarden, aún no se ha hecho mención de la sensación de adrenalina más increíble que un peruano en Huacachina pueda haber vivido. Sin sospechar la inclemencia del tiempo y la distancia del recorrido, nosotros en el tubular ya estábamos en la cima de alguna duna  por ahí y de muchas más que no se pudo llegar. La verdad, una vez terminado el recorrido en el tubular, una nueva emoción volvía a nacer dentro de mis sentimientos, una sensación con un poco de miedo y atrevimiento a la vez, porque cuando uno observa el paisaje y la altura de semejante duna,  la conciencia y la razón le murmuran al oído diciendo que esta oportunidad no se presenta a menudo y ya con ese auto consejo, el cuerpo y la mente están decididos  a deslizarse a más de 180 metros sobre una tabla enganchada a tus pies. Cada revolcón es parte del aprendizaje que todos deben atravesar, pero cada revolcón también es sinónimo de un gran dolor, dolor recompensado al fin. Después de tantos intentos frustrados pensaba que en alguno de ellos el momento llegaría; y así fue. Tomando una foto panorámica del abismo que me esperaba, la tabla empezó a deslizarse y la velocidad iba impregnándose en mi piel. Es increíble ver cómo puedes, al igual que el surf, tomar el dominio de algo imponente, de algo grande de la naturaleza.

Ya para concluir esta intensa experiencia sureña; tengo que admitir lo sorprendido que me dejo Huacachina al saber que tenía algo tan sorprendente a 5 minutos de mi trabajo sin sospecharlo. Ahora, que ya no estoy a 5 minutos de esto, y por el contrario, a cientos de kilómetros de distancia; lo único que me queda es plasmar mis sentimientos y emociones en estas líneas expresando que la vida a veces es un poco ingrata con uno. Porque por momentos,  la gente espera mucho de las lugares que en realidad no sabe si merecen la pena o no visitar. Huacachina fue una de mis mejores experiencias, esas las de nunca olvidar, y por esa sensación que me embarga,  hoy tengo la enorme oportunidad de invitar a todos los deseosos del disfrute, del gozo, de la adrenalina, del placer y del relax, pero acompañando todo  esto; sabiendo que es  de la casa, de nosotros y al fin, nuestro.  !Estas desperdiciando tu vida, si eres peruano y no te gusta viajar!

PAÚL ANTICONA GUTIERREZ

VIRGEN DEL SOCORRO, VIRGEN DE LOS PESCADORES

La Región La Libertad, en especial la ciudad de Trujillo, es hoy en día una de las más visitadas por muchos turistas, ya que posee un amplio escenario por su diversidad en atractivos turísticos con los cuales muchos quedan maravillados al conocerlos, tales como la grandiosa ciudad de Chan Chan, las imponentes Huachas de Moche,  el centro histórico de Trujillo, casas e iglesias coloniales y republicanas, entre otros.
Trujillo, se caracteriza por recibir turistas de todo el mundo durante todo el año, que quieren realizar un turismo cultural, el cual es el más tradicional en nuestra ciudad. Pero esto puede cambiar e innovarse, presentando a los turistas las cuantiosas opciones de actividades que pueden hacer en esta hermosa ciudad, tales como un turismo de aventura, gastronómico y también turismo religioso.
Y es que no sólo se puede hacer turismo cultural en nuestra ciudad, sino que el turismo religioso puede llevarnos a acoger más turistas a lo largo del año, ya que nuestras poblaciones poseen fiestas muy tradicionales de sus distritos que son experiencias totalmente nuevas para turistas extranjeros.

La población trujillana a lo largo del año celebra muchas fiestas por las que son conocidas ante el mundo, y  no sólo me refiero a las celebraciones por el Festival de la marinera, baile tan tradicional para los norteños, o por las fiestas de la primavera con las cuales damos otra vez inicio al florecimiento de un ambiente cálido, con un clima que muchos disfrutan el resto del año; sino también  a las festividades y costumbres que aún se conservan y celebran en los diferentes distritos que integran esta ciudad colonial.  
Muchos turistas hoy en día vienen a la ciudad para apreciar, debido a la representatividad que tienen, las fiestas religiosas o patronales que son muy típicas en sus zonas y por las cuales se caracterizan y distinguen; tales como la fiesta a San Isidro, la Virgen de Santa Lucía en Moche, la fiesta del Señor de Huamán,  fiesta de San Pedro y San Pablo y la fiesta de la Virgen del Socorro en Huanchaco.
En este mes de Diciembre los turistas podrán participar de las celebraciones que se darán a cabo como todos los años hacia la Virgen del Socorro, la cual tiene su Santuario en la Iglesia del distrito de Huanchaco, y que se caracteriza por ser una de las festividades más importantes, que están cargadas de religiosidad y diversas expresiones de danzas dedicadas a la virgen. 

Hace ya 330 años que llegó al Distrito de Huanchaco, la imagen de una Virgen  con el Niño Jesús en brazos, con una mirada tierna que transmitía la más pura sensación de una madre totalmente entregada a su hijo. Esta imagen fue acogida por los pescadores huanchaqueros por pedido del franciscano Fray Alonso de Escarcena, la cual cuidaría desde el cerro del balneario huanchaquero a todos sus habitantes, y que con el paso de los años se darían cuenta que esta venerada cumplía los más aclamados pedidos de sus hijos. Por ello se decide celebrarla haciendo romerías y bajadas desde el 13 de Diciembre de 1681  llevándola hasta Trujillo cada 5 años desde 1965, pero en el distrito siempre se le celebra y su fiesta es acompañada de danzas preparadas para ella agradeciéndole por ser la mejor guardiana de Huanchaco.


La danza del Diablo, es una danza popular que se caracteriza por el baile de hombres danzarines con una vestimenta muy peculiar y colorida que acompañan a la Virgen Viajera cada 5 años durante su recorrido, pero siempre danzando frente a la imagen del Arcángel San Miguel. Siendo esta la única en el Perú, por su estilo y pasos característicos. Pero no solo esta danza acompaña los pasos de la Virgen del Socorro, sino también Las Pallas, quienes son jóvenes de 10 a 18 años las que acompañan con sus cánticos de alabanza todas las romerías que se hacen por esta virgen venerada.



A mis 22 años puedo decir que cada vez más muchas personas acuden a las fiestas de esta hermosa virgen, y no sólo pobladores de Huanchaco, Trujillo y del Perú; sino turistas se que quedan maravillados al ver tantos tipos de expresiones hacia ella. Y es que mis ancestros pertenecen a un pueblo pequeño que también participa de todas estas celebraciones, Huanchaquito, en donde muchos pobladores forman parte de los grupos danzantes en forma de agradecimiento por haberles concedido algún milagro o simplemente porque sintieron el llamado de servir a esta reina.
He participado de muchas romerías, celebraciones y veneraciones durante muchos años, por los que puedo decir, que el participar de esta festividad para los creyentes es algo muy gratificante y reconfortante. Por ello, debemos fomentar la incursión de nuevas opciones de turismo en la ciudad, y no sólo por la fiesta de este distrito en el último mes del año, sino de muchos más  que figuran como acontecimientos programados a lo largo del año en las distintas localidades de la región que presentan la misma importancia y que lograrán motivar al turista por conocerlas, disfrutarlas y vivirlas.

GISELLA GORDILLO ANDONAIRE